Como medio, celebramos la masificación y difusión de los sonidos colombianos. No obstante, en los últimos días, resulta imposible ignorar el surgimiento de nuevas sonoridades que resuenan de manera notable en la ciudad de Cartagena de Indias.
El cierre del año 2024 estuvo marcado por la canción “Coqueta”, interpretada por el artista santandereano Feizar Orjuela, conocido artísticamente como “Heredero”. Al ritmo de la Carranga, esta canción ha conquistado diversas emisoras y fiestas caseras, convirtiéndose en un himno dedicado al romanticismo y al enamoramiento. Su éxito ha impulsado una carrera musical a nivel nacional, generando la incógnita sobre si a los cartageneros les agrada este género musical o simplemente lo adoptan como un punto de partida debido a su viralización en redes sociales, en una ciudad que se mueve entre sonidos caribeños como la Champeta, el Reguetón y la Salsa. Cabe destacar su colaboración con el intérprete de música popular Jessi Uribe, que contribuyó a catapultar este éxito de fin de año.
No obstante, ¿cuánto conocen los cartageneros sobre la música boyacense? Sin temor a equivocarnos, gran parte de la población local solamente reconoce “La Cucharita” del precursor y cantautor Jorge Velosa, una canción que muchos identifican de manera jocosa o simplemente como música asociada a tareas o presentaciones escolares distantes de nuestra realidad urbana.
Es crucial que no sea solo por casualidad que, debido a una sola canción, se encasille un género musical tan rico tanto en términos musicales como líricos. Es necesario aprovechar este impulso para abrir las puertas a otros intérpretes y agrupaciones musicales, como Las Reinas de la Carranga, Los Carrangueros de Ráquira, Los Rolling Ruanas, Los Doctores de la Carranga, Velo de Oza, entre otros, no a manera de golpe, sino como amantes a una diversidad sonora que abre puertas y consolida nuestra riqueza cultural.
Un comentario en «(Opinión) La nueva ola musical en Cartagena: ¿moda pasajera o cambio duradero? / La Música En Venas»
Bueno, teniendo en cuenta la diversidad musical del Caribe, creo adoptamos diversos generos ya que siempre hemos estado abiertos al gran abanico de posibilidades a pesar que como lo menciona el articulo tengamos preferencias musicales ya arraigadas como la champeta, la salsa, la terapia criolla, música urbana, vallenato, etc… pero como caribeños ciudadanos del mundo siempre estaremos acogiendo una que otra canción de cualquier otro genero que nos genere mucho feelin’ y empatia.
Bueno, teniendo en cuenta la diversidad musical del Caribe, creo adoptamos diversos generos ya que siempre hemos estado abiertos al gran abanico de posibilidades a pesar que como lo menciona el articulo tengamos preferencias musicales ya arraigadas como la champeta, la salsa, la terapia criolla, música urbana, vallenato, etc… pero como caribeños ciudadanos del mundo siempre estaremos acogiendo una que otra canción de cualquier otro genero que nos genere mucho feelin’ y empatia.